"Nada podemos esperar sino es de nosotros mismos " J.G. Artigas


Educación y menores infractores en Uruguay

27.10.2014 17:06

"Educad a los niños y no será necesario castigar a los hombres"

PITÁGORAS

 

 

Introducción

Jóvenes infractores y educación constituyen términos que hoy por hoy parecen estar desasociados, debido a una multiplicidad de factores. Con este articulo se pretende ver cual es el nivel educativo de estos jóvenes y que se esta haciendo por parte de las instituciones correspondientes para lograr su reinserción al sistema educativo.

 

 

En primer lugar debemos establecer a quienes nos referimos cuando hablamos de jóvenes infractores, estos son los jóvenes que hoy por hoy se encuentran en los establecimientos del Instituto Técnico de Rehabilitación Juvenil (INTERJ) e incluye dos áreas: la de medidas alternativas y la de privación de libertad.

A la fecha la mayoría de los lugares de encierro se encuentran en la Colonia Berro ubicada en la localidad de Suárez (hogares Sarandí, Piedras, Ituzaingó, Ser, Ariel, Cerrito, Hornero y la Casona, estos tres últimos sin cerco perimetral). El resto de los hogares están en Montevideo: Puertas (centro de ingreso), Ciaf (único centro femenino), Desafío (los de 13 y 14 años), Cemec, Paso a Paso y Cimarrones (se encuentran en régimen de semi libertad). Esta privación de libertad se debe dar bajo el prisma de los Derechos Humanos, lamentablemente no es así en alguno de los hogares, coexistiendo condiciones muy disímiles en unos y otros.

El INAU atiende actualmente a 60.500 niños, niñas y adolescentes en distintas modalidades que incluyen tiempo parcial, tiempo completo y la parte de infractores .

De los 60.500 niños que atiende el INAU en todo el país, unos 1000 se encuentran en programas de rehabilitación y 550 privados de su libertad. Los considerados “peligrosos”, es decir, los que tienen mayores dificultades de comportamiento, son los concentrados en el SER y en Piedras de la Colonia Berro.

Estos jóvenes, en la mayoría de los casos, no lograron transformarse en estudiantes en

el pasaje de la niñez a la adolescencia. Esto equivale a señalar que la mayoría no ha permanecido al interior del sistema educativo.

El inicio de la trayectoria delictiva sin duda fue antecedido por un alejamiento temporal

anterior del sistema educativo (sea por abandono sea por expulsión) o puede haberse producido como un proceso paralelo.

A nivel general, se trata de jóvenes que no han alcanzado el nivel educativo estipulado como obligatorio por ley para su edad y que se encuentran fuertemente rezagados. Las puertas futuras que se abren tienen que ver con el aprendizaje de oficios.

Es así que, defender y sostener la importancia de la asistencia al sistema educativo para niños y jóvenes, procurar el desarrollo de habilidades y conocimientos, insertar hábitos y rutinas de estudio son metas sociales que pueden apercibirse como las más difíciles y lejanas mirando la experiencia de estos jóvenes .

Actualmente la administración nacional de Educación Pública (ANEP), a través de la Dirección Sectorial de Educación de Adultos del Consejo Directivo Central (CODICEN), atiende actualmente a más de un centenar de jóvenes menores de edad internados en el Sistema de Responsabilidad Penal Adolescente (SIRPA), mediante propuestas educativas adecuadas a una población de alta complejidad.

En este caso, la oferta educativa contempla las pautas curriculares del ciclo escolar y se complementa con talleres y otras técnicas pedagógicas motivacionales de abordaje multidisciplinario, que contemplan siempre el contexto, ya que se trata de una población que está privada de su libertad.

Aún así, según estudios realizados por el fondo de las Naciones Unidas. son pocos los adolescentes que participan de estos proyectos educativos, estando la mayoría por fuera de los mismos, ya sea por su conducta, o porque simplemente se niegan a participar de los mismos.

Por lo tanto las trayectorias delictivas y de educación son caminos laberínticos de la configuración del futuro de jóvenes infractores.

 

Si realmente se realizará un seguimiento de los niños y jóvenes que abandonan el sistema educativo tal vez se pudiera prevenir de antemano la delincuencia juvenil, entre cuyas causas se encuentran la falta de educación tanto formal, como familiar.

 

 

 

 

Bibliografía

 

  • Viscardi Nilia “Políticas para menores infractores en Uruguay” artículo Movimiento

  • Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, unicef Nacional Gustavo Volpe proyecto Observatorio del sistema judicial “ Privados de libertad. La voz de los adolescentes ”

 

 

Angelina Cuña- 3°A

 

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